¡Síguenos!

Yoga para embarazadas guía para una gestación saludable

Yoga para embarazadas: guía completa para una gestación saludable

Contenidos

Practicar yoga para embarazadas no sólo es beneficioso durante esta etapa sino también de cara al parto y el postparto. ¿Cómo puede ayudarte esta disciplina? En Décimas te contamos todas las ventajas de este deporte y cómo adaptarlo a cada etapa de la gestación.

Beneficios del yoga durante el embarazo

Las clases de yoga para embarazadas son muy recomendables, pues ofrecen numerosos beneficios:

  • ✅Te mantienen activa para tener un embarazo saludable.
  • ✅Te ayudan a estar fuerte y ágil, aportando flexibilidad a tus músculos y articulaciones.
  • ✅Previenen dolores en esta etapa.
  • ✅Mejoran tu estado de ánimo porque te ayudan a liberar endorfinas.
  • ✅Ayudan a la relajación.
  • ✅Te preparan física y psicológicamente para el parto.
  • ✅Favorecen la digestión.
  • ✅Mejoran la circulación sanguínea.

Además, aunque no lo hayas practicado antes, iniciarte en el yoga durante el embarazo puede ser una gran idea porque las posturas de yoga para embarazadas pueden adaptarse a cada etapa.

Yoga para el tercer trimestre: adaptaciones y consejos 

El yoga para embarazadas se recomienda una vez que hayas superado el primer trimestre aunque, si ya lo practicabas anteriormente, podrías comenzar en la semana 10-12. Eso sí, en cualquier caso, debes consultar previamente a tu médico antes de iniciar cualquier tipo de actividad física.

Se puede practicar el yoga para embarazadas hasta el tercer trimestre, siempre que no sientas molestias, por lo que es importante que escuches a tu cuerpo.

Posturas y consejos de yoga seguras para el tercer trimestre

A partir de la semana 28 de embarazo, el yoga para embarazadas se adapta para prepararte específicamente para el momento del parto. Las asanas del tercer trimestre, por tanto, suelen ser posturas que favorecen la apertura de caderas con el fin de reducir la intensidad de las contracciones al dar a luz.

En todo caso, estos ejercicios deben hacerse bajo supervisión y es fundamental no realizar posturas que requieran de mucho equilibrio para evitar caídas. También se debe acortar la duración para no fatigarse y tener mucho cuidado con los estiramientos. Estos consejos deben aplicarse durante todo el embarazo, no sólo en el tercer trimestre, para practicar yoga de manera segura.

Ejercicios de yoga para embarazadas

Como decimos, el yoga para embarazadas se va adaptando según las necesidades de cada etapa. Por eso, tienes ejercicios específicos para cada trimestre de la gestación. Aquí te ofrecemos algunos ejemplos:

  1. 1er trimestre. Postura del sastre sentado, postura del molinillo o postura de la paloma. Deben ser asanas sencillas y relajadas para evitar náuseas y otras molestias.
  2. 2º trimestre. Postura del gato. Las asanas tendrán por objetivo aliviar la tensión de la parte baja de la espalda, por lo que debes evitar posturas en las que permanezcas tumbada. Puedes usar, en cambio, sillas y pelotas para hacer los ejercicios.
  3. 3er trimestre. Postura de la diosa o postura del guerrero. Como ya hemos dicho, se busca la preparación para el momento del parto.

Con estos ejemplos de ejercicios de yoga para embarazadas puedes mantenerte activa en todas las etapas de la gestación.

Clases de yoga para embarazadas: cómo elegir la adecuada

El yoga para embarazadas permite mejorar la resistencia muscular y la flexibilidad pero debe practicarse de manera controlada y bajo supervisión para evitar posturas que supongan un riesgo.

A la hora de elegir las clases, ten en cuenta tu nivel y tu estado físico, además de las recomendaciones de tu especialista. Si existe riesgo de parto prematuro o alguna enfermedad, no es recomendable practicarlo. Y, si no hay ninguna contraindicación en tu caso, recuerda siempre que debes adaptar los ejercicios a cada etapa del embarazo.

				
					A la hora de elegir las clases, ten en cuenta tu nivel y tu estado físico, además de las recomendaciones de tu especialista. Si existe riesgo de parto prematuro o alguna enfermedad, no es recomendable practicarlo. Y, si no hay ninguna contraindicación en tu caso, recuerda siempre que debes adaptar los ejercicios a cada etapa del embarazo.
				
			

Noticias destacadas

Categorías

¡Comparte!

Dejar un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Dejar un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Noticias relacionadas

¡Síguenos!