Quizás estás un poco perdido con el entrenamiento para trail running. ¿Debe ser el mismo que para una carrera normal? Hoy vamos a hablar sobre la carrera trail y a daros algunos consejos para prepararla.
El trail running es un deporte que como bien sabrás consiste en correr “fuera de pista”. Puede ser por senderos o caminos secundarios que atraviesan montañas y montes y puede llegar a incluir grandes bajadas y subidas o cruzar ríos y arroyos.
Si las zapatillas son las “reinas” del material deportivo, en trail running es aún más importante prestar atención a comprar unas buenas zapatillas de running trail. Lo ideal será que no sean muy pesadas y cuenten con una suela de relieve, que se agarre bien al suelo y amortigüen.
Empezar el entrenamiento para trail running
El entrenamiento para una carrera trail varía respecto a una carrera normal porque el uso que hacemos de las distintas partes del cuerpo es distinto.
En primer lugar tendrás que preparar bien tus piernas para las subidas y bajadas. En algunos tramos de una pista puedes encontrar verdaderas subidas y bajadas escarpadas que en ocasiones solo podrán ser sorteadas casi escalando. Por lo que lo más importante será que tengas los músculos de las piernas ejercitados y fuertes.
Para entrenar este aspecto lo mejor es que busques una subida y entrenes en ella. Puedes variar a veces tramos cortos pero intensos y otras carreras continuas. Lo ideal sería mezclar bajadas y subidas en una misma sesión de entrenamiento para trail running, aunque es cierto que puede llegar a ser monótono si no cuentas con una pista que cumpla estas características. Sin embargo, mejorará la fuerza y la técnica de la zancada.
En segundo lugar debes saber que para las carreras de montaña las distancias y los ritmos no tienen la misma importancia que cuando entrenas para una carrera convencional. Aquí prima la resistencia que seas capaz de mostrar al terreno (el cual además puede cambiar drásticamente según las condiciones meteorológicas), los desniveles y obstáculos. De nada te servirá tener los ritmos y tiempos totalmente controlados porque cada terreno es distinto y cambia.
Por último, la adaptación a este nuevo terreno es lenta y requiere tiempo. Aunque ya tengas una experiencia corriendo en pista o carretera no subestimes la montaña. La propia presión y los cambios climáticos pasan factura. Entre semana entrenar en un parque o pequeño sendero será mejor que en carretera. Los fines de semana haz una buena tirada en la montaña.
Consejos para el entrenamiento de trail running
Te damos algunos consejos que pueden servirte de mucha ayuda cuando ya estés inmerso en la carrera.
Hay ocasiones en las que el terreno es tan abrupto que no valdrá la pena intentar hacerlo corriendo y será mejor hacerlo andando. Incluso podremos así ayudarnos con las manos en las rodillas o incluso ayudarnos con el propio terreno.
A veces se meten pequeñas piedras dentro de las zapatillas. Es mejor parar y quitarlas que intentar seguir, ya que puedes causarte una lesión que más tarde te pasará factura. En el entrenamiento para trail running haz lo mismo.
A la hora de competir lo que suma son las bajadas. La técnica, reflejos y fuerza en nuestras piernas determinarán nuestra posición en la carrera. Si te encuentras en una bajada con otro corredor no te coloques justo detrás de él pues perderás visión del terreno y pierdes tiempo en caso de un imprevisto.
En cualquier mochila de entrenamiento trail running siempre deberás tener unos mínimos que te permitan “sobrevivir” en la montaña. Te recomendamos que cuentes con un par de parches que actúen como segunda piel en caso de rozadura. También alguna camiseta técnica de manga larga y corta, braga de cuello y guantes. El desnivel y los distintos tipos de vegetación pueden jugarnos una mala pasada.
Esperamos haberte ayudado a prepararte para dar el salto al Trail. ¡No te arrepentirás!