La montaña ofrece muchas posibilidades de diversión durante todo el año. A pesar de que normalmente se asocia a deportes de invierno como el esquí, el snowboard o el descenso en trineo, son muchas las actividades que se pueden realizar en las zonas de sierra durante el verano.
Aquellos que decidan pasar las vacaciones cerca de una cordillera, pueden elegir entre una gran variedad de deportes diferentes para disfrutar del aire libre y conocer a fondo la montaña. La forma física no debe ser un impedimento para divertirse, hoy destacamos tres de estos deportes aptos tanto para expertos deportistas como para personas que nunca han entrenado.
Senderismo
La principal ventaja del senderismo es que lo puede realizar prácticamente todo el mundo. Caminar por la montaña por sendas señalizadas permite descubrir rincones naturales que, de otro modo, pasarían desapercibidos.
El senderismo aporta gran satisfacción, reduciendo notablemente los niveles de estrés y ansiedad. Caminar a buen ritmo permite tonificar los músculos, reforzar el sistema inmunitario y prevenir la obesidad y las enfermedades cardiovasculares.
Aunque este deporte no requiere un equipamiento especial, es conveniente utilizar ropa cómoda y adaptada a la temperatura, a gorra y gafas para protegerse del sol durante el verano.
Escalada
Para practicar escalada en la montaña es recomendable estar familiarizado con el deporte y haber practicado anteriormente en rocódromos si se quieren evitar los sustos. La montaña es gran amiga de los escaladores, pero es importante no perderle el respeto.
Escalar aporta numerosos beneficios tanto físicos como mentales:
- Permite despejar la mente, ya que es necesario poner los cinco sentidos en lo que se está haciendo para no dar un mal paso.
- Hace que trabajen todos los músculos del cuerpo, ya que se debe avanzar y permanecer en posición vertical constantemente.
- Mejora la flexibilidad y la lubricación de las articulaciones.
- Ayuda a aumentar la confianza en otras personas, incluso desconocidos, ya que la escalada es, en realidad, un deporte de equipo.
Para enfrentarse a la montaña, se debe elegir ropa cómoda que ofrezca libertad de movimientos, como leggings y camisetas pegadas al cuerpo fabricadas en materiales ligeros que, además, no corren el riesgo de engancharse en algún saliente de la roca.
Rafting
El rafting permite conectar con la montaña, con el agua y con los compañeros de balsa a partes iguales. Este deporte, no apto para miedosos, es perfecto para disfrutar del aire puro y la naturaleza. Además de reducir el estrés, fortalece los músculos y fomenta el trabajo en equipo, lo que le convierte en el deporte ideal para practicar en familia o en actividades de team building de empresas.
A pesar de ser un deporte acuático, hay que elegir cuidadosamente el calzado para practicar rafting. Lo más recomendable es que sea impermeable y con una suela resistente y antideslizante para los momentos en que se debe caminar por las rocas.